¿Cómo funciona una cocina de leña?

Una cocina de leña funciona mediante la combustión de biomasa de madera. Mediante la combustión de madera, una cocina de leña produce calor para cocinar alimentos y para calentar el entorno. En resumen,

¡satisface dos necesidades básicas en todos los hogares con una sola actividad

¿Cómo se cocina con un sistema de leña?

Las cocinas de leña suelen estar equipadas con un horno y una plancha con círculos para cocinar todos sus platos favoritos, desde pasta hasta carne, desde verduras hasta postres. Todo de forma sana y saludable y con el sabor único que sólo la cocina de leña puede proporcionar. Se puede cocinar de todo, a veces con un poco de paciencia porque la cocina de leña puede tardar más en algunos platos. Sin embargo, en la otra cara de la moneda, esto significa sabores más desarrollados y mezclados y una carne más tierna. He aquí algunos ejemplos. Recuerde siempre que la cocina es su reino y que las indicaciones son sobre todo subjetivas. Diviértete quitando y añadiendo, hasta que encuentres el plato perfecto para ti y tu familia.

Rico caldo de carne de inspiración asiática

Por supuesto, lo sabemos. Tradicionalmente, el pot roast se hace con ternera, o al menos con una carne roja. Nosotros, sin embargo, queremos ofrecerte esta nueva versión, más ligera, herbácea y ácida. Es muy sencilla. Colocamos los muslos de pollo en una sartén caliente y ligeramente honda y los doramos por ambos lados. Para conseguir un buen dorado, procura no mover mucho el pollo. Darle una vuelta, ¡un par como mucho! Cuando estén dorados como nos gusta, añadir el vino blanco, el zumo de limón, la ralladura de limón, la sal, la pimienta negra, el ajo y una picada de hierbas frescas compuesta por romero, laurel y salvia. Si te gusta el sabor del limón, puedes añadir unas arandelas justo encima de los muslos de pollo.

Cubre con una tapa y deja cocer durante 1 hora. Al final, retira el pollo y, si quieres, deja que la salsa espese un poco más. Servir con un poco más de las hierbas picadas, frescas. ¿Quieres darle un toque muy especial, ligeramente oriental, a este pollo estofado? En lugar de limón fresco, añade limones salados. Puedes prepararlos en casa, es muy fácil, o comprarlos en tu carnicería árabe más cercana. Serán un toque único para tu plato, pero con menos acidez.

Rico caldo de carne de inspiración asiática

No olvidemos que la cocina de leña también tiene horno. Un horno con el que hornear estupendas tartas. Si no quieres lidiar con masas fermentadas, entonces la tarta es para ti. Antes de extender la masa, métela un rato en la nevera para que sea más fácil manejarla. Presta atención a la temperatura del horno y nunca te pases, la tarta se puede quemar, sobre todo si la haces al revés. Para hacerla al revés, simplemente coloca tu fruta o mermelada (en este caso cerezas, pero elige la que más te guste y asegúrate de que, si es fruta, sea de temporada) en el molde, sola, sin cubrirla con masa. A continuación, extiende y recorta la masa como más te guste y cubre completamente la fruta o la mermelada. Espolvoréelo todo con azúcar

Risotto de pasta con salsa de tomate y salchicha

Con tu caldo de carne recién preparado, pues, puedes hacer un primer plato estupendo, sobre todo en época de frío. Hablamos de la pasta risotto, es decir, pasta cocida añadiendo el caldo poco a poco como si fuera risotto. Este método de cocción combina a la perfección con la cocina de leña, permite controlar la cocción de la pasta a la perfección y llevará a la mesa una pasta cremosa y deliciosa. Recomendamos añadir un poco de salsa de tomate y salchichas previamente doradas a la pasta del risotto en el caldo de carne para darle un toque crujiente. Como forma de pasta, sin embargo, recomendamos la pasta corta, para que toda la salsa que generará el almidón se acumule en los "agujeros" de la pasta.

Tarta invertida de cerezas y almendras

No olvidemos que la cocina de leña también tiene horno. Un horno con el que hornear estupendas tartas. Si no quieres lidiar con masas fermentadas, entonces la tarta es para ti. Antes de extender la masa, métela un rato en la nevera para que sea más fácil manejarla. Presta atención a la temperatura del horno y nunca te pases, la tarta se puede quemar, sobre todo si la haces al revés. Para hacerla al revés, simplemente coloca tu fruta o mermelada (en este caso cerezas, pero elige la que más te guste y asegúrate de que, si es fruta, sea de temporada) en el molde, sola, sin cubrirla con masa. A continuación, extiende y recorta la masa como más te guste y cubre completamente la fruta o la mermelada. Espolvoréelo todo con azúcar.

Mermelada

Hablamos de la mermelada, ¿por qué no hacerla en casa? Tenemos que cortar y pelar la fruta y colocarla en una olla, preferiblemente de barro. Añadimos azúcar y, si queremos, algún otro aromatizante, y mezclamos muy bien. La cantidad de azúcar depende de cada uno. Normalmente, nuestras abuelas nos enseñan que por cada kilo de fruta, va un kilo de azúcar, ¡pero no es obligatorio! Pon un poco menos si quieres una mermelada que sepa más a fruta. También depende de la calidad de la materia prima. Para espesarla, puedes añadir pectina o unos trocitos de manzana. Cuécela hasta que alcance la densidad deseada. ¡No dejes nunca de removerla!